Estaciones de Servicio en alerta por el congelamiento de los precios de los combustibles
Empresarios del sector expresaron su profundo malestar con la decisión de las petroleras de mantener sin cambios los valores en el surtidor desde el mes de mayo. “Los ánimos están muy caldeados”, advirtieron.
Expendedores de la provincia de Neuquén y Río Negro se reunieron ayer para decidir si aplican un adicional sobre el precio de los combustibles de modo de paliar el perjuicio que les provoca el congelamiento que YPF -y por consiguiente el resto de las petroleras- mantiene en los surtidores desde el mes de mayo.
La medida generó que la mayoría de las Estaciones de Servicio de la región -y de todo el país- operen con rentabilidad negativa, producto del estancamiento del valor de la nafta y el gasoil en contraposición con el incesante aumento de los costos de funcionamiento.
Este escenario incluso se ve agravado por los crecientes quiebres de stock que experimentan las estaciones del interior del país a causa de la desactualización del precio, ya que las compañías prefieren guardar el combustible para abastecer a sus propios negocios, dejando fuera del circuito a los jugadores más chicos.
“Los ánimos están muy caldeados”, advirtió el presidente de la Cámara de Expendedores de esas provincias Carlos Pinto, a la salida del encuentro. “Decidimos esperar unos días más para definir si finalmente sumamos un plus a los combustibles”, expresó en diálogo con surtidores.com.ar.
Por lo pronto, los empresarios circularán una solicitada en los principales medios gráficos para explicar cómo es la situación del sector en este contexto. “Queremos alertar a la ciudadanía y nuestros gobernantes de las posibles medidas a adoptar”, sostuvo el directivo de la CECNERN.
Según un informe presentado por CECHA en base a datos de la Secretaría de Energía, una Estación de Servicio necesita vender 315 mil metros cúbicos de combustible al mes para llegar al punto de equilibrio, una cifra inalcanzable para el 52,3 por ciento del mercado.
De acuerdo al mismo trabajo, la caída del volumen de ventas en los últimos años estuvo potenciado por el combo pandemia más recesión, que comenzó en abril de 2018. Por esta razón, en los últimos tres años, se perdió en volumen de ventas el equivalente a 5,2 meses de trabajo.