¿Cuál es el punto de equilibrio de las Estaciones de Servicio en un contexto de caída del consumo?
A pesar de la suba de precios, la línea de flotación para cubrir los costos operativos se mantiene en niveles relativamente altos para la mayoría de las expendedoras de combustibles.
El incremento en los precios de los combustibles -de un 62 por ciento en lo que va del año y del 262 por ciento desde noviembre de año anterior- ha llevado a una menor demanda de productos energéticos. En este contexto, el punto de equilibrio se vuelve un objetivo más difícil de alcanzar para muchas Estaciones de Servicio independientes. Según reveló el gerente general de CECHA, Guillermo Lego, el índice se sitúa actualmente, en promedio, en 310.000 litros mensuales.
Este indicador sin embargo, no es estático y varía debido a diversos factores económicos. “La caída del consumo condiciona la estabilidad operativa del sector”, detalla el ejecutivo. “Posiblemente las ventas de mayo (tiene 31 días) sean mayores a las de abril, pero seguiría con un porcentual bastante menor comparándolo con el mismo mes del 2023”, precisó.
Lego aclaró que esta variable corresponde a las estaciones que se enmarcan en el régimen de compra – venta. “Es diferente en el caso de las YPF, ya que por su característica de contrato en consignación, si bien tienen menores comisiones, sus volúmenes de expendio son significativamente mayores a la media”, destaca en diálogo con surtidores.com.ar.
Para este segmento, el directivo sostiene que la línea de flotación es menor. “Se ubica por debajo de los 300 / 290 m3, cantidad que suelen superar normalmente”, precisa, agregando que los operadores perciben además otros beneficios a la hora de cobrar con tarjetas de crédito, que aminoran el esfuerzo financiero que representa su cobranza.
Entre los factores que provocan la necesidad de alcanzar este nivel de ventas para llegar a fin de mes, se destaca el aumento de las tarifas eléctricas, que superan el 300 por ciento. “Este incremento supera con creces el ajuste en el precio del producto que vendemos”, observó por su parte Nicolás Bianchi, secretario de la Cámara de Expendedores de Santiago del Estero.
Asimismo remarca que el impacto del sinceramiento del precio de la nafta, ha inducido la rotación de la demanda de productos premium (que proporcionan mayor rentabilidad) a combustibles de menor costo.
Al respecto, el analista de temas energéticos Antonio Rossi, opina que “la nafta constituye uno de los productos de primera necesidad para la gente“. Esto ha llevado a que los consumidores adopten comportamientos similares a la hora de elegir, como ocurre con los alimentos o la indumentaria. Así como las personas han modificado sus hábitos de consumo en el supermercado, optando por marcas más económicas, también lo hacen con las naftas.
“Los combustibles más caros se habían convertido en un salvavidas para los operadores en los meses de control de precios, pero esta situación ha ido retrocediendo a medida que continúa cayendo el consumo“, concluyó Rossi.